
La esclavitud ha estado presente en diversas civilizaciones antiguas, como la antigua Mesopotamia, Egipto, Grecia y Roma. Durante la época de la colonización europea de América, desde finales del siglo XV hasta el siglo XIX, la esclavitud alcanzó proporciones masivas debido al comercio transatlántico de esclavos. Millones de africanos fueron capturados, transportados a América y forzados a trabajar como esclavos en plantaciones y minas.