Una joven rescató a un gigante oso pardo y ahora es su mejor amigo

Muchas veces creemos haberlo visto todo, y aun así continuamos sorprendiéndonos. Este es este el caso de Veronika Dichka, una mujer que dedica su vida a la pesca y al aire libre. Es oriunda de Novosibirsk, al norte de Siberia, y pasa su tiempo en compañía de una mascota un tanto particular.

Veronika tiene solo 2688 seguidores en su cuenta de Instagram, pero su historia se ha hecho conocida por su simpático compañero: un oso pardo llamado Archie. Recordemos que estos animales son una especie de mamífero carnívoro de la familia Ursidae propio de Eurasia y Norteamérica. Esta clase de osos hizo su aparición en este planeta hace 250.000 años. Con el paso del tiempo, el número ha ido decreciendo lamentablemente.

Sin embargo, en Rusia puede ser una mascota porque toda su vida ha vivido en cautiverio. Los osos pardos en estado salvaje viven una media de veinticinco años. Los ejemplares cautivos tienen mayor esperanza de vida, un dato alentador para Veronika.

Dichka ha contado su historia en la red de la camarita: “Archie me ve como un miembro de su familia. Compartimos la comida, duerme en mis brazos cuando tiene miedo y se esconde detrás de mí. Lo rescatamos del parque safari pero no podemos liberarlo en la naturaleza porque ha vivido en cautividad toda su vida. Archie pasa todos los días con nosotros y está locamente enamorado del agua. Le gusta mucho cuando le llevo a sitios nuevos, así que esta sesión de fotos fue un placer para él”.

Ambos se han tomado hermosas fotografías pescando en medio de un lago en Novosibirsk, al norte de Siberia. Aunque se podría pensar que Archie es agresivo, no ha sido así con Veronika. Según datos de la Fundación Oso Pardo, sólo ha habido “38 ataques de oso pardo en la cordillera Cantábrica en los últimos 40 años”. Si bien aseguran que no son agresivos de por sí, “solicitan una regulación adecuada de las actividades recreativas al aire libre en áreas oseras”.

¿Cómo llegó Archie a la vida de Veronika Dichka?
Archie era solo un cachorro cuando el zoológico local que lo tenía se declaró en quiebra. Cuando Veronika se enteró de esto, preguntó si podía adoptar al animal. Desde que se recibió el sí, ambos están juntos inseparablemente. Como toda su vida ha estado en cautiverio, consideran que el oso no podría valerse por sí mismo en un bosque. Aunque es bastante particular la amistad, son fieles y cuidan mucho el uno del otro.

Fuente: tn